viernes, 30 de noviembre de 2012

Bosque

Emprendió un camino que nadie más excepto ella conocía. 
En lo más profundo del bosque escondió algo. 
Guardado en secreto, protegido hasta su regreso. 

domingo, 25 de noviembre de 2012

Cenando en París

Primera parte: Café du Trocadéro.
   
   -Sólo hay que verla en persona para saber que la Torre Eiffel es la obra más impresionante de Alexandre Gustave Eiffel, construida en 1889. Cada cinco años se le repasa cincuenta toneladas de pintura para protegerla de la corrosión, por eso se ve tan radiante.
   El desconocido se sentó con la mujer que le había estado escuchando mientras contemplaba la Torre Eiffel. Pidió un menú de la carta y sacó el paquete de cigarrillos para fumar. 
   -Llevaba un rato observándote sentada aquí sola. No pensaba en intentar contigo algo, he visto el anillo de compromiso en tu dedo, sino lo que me llamó la atención fue tu rostro impasible ante la belleza de París. Sin decir nada puedo oír tus pensamientos, tus gritos ahogándose en un mar profundo. Intentas salir, luchas con todas tus fuerzas, sin embargo, alguien te lo impide… O quizás en realidad eres tú misma. Uno de mis dramaturgos favoritos españoles, Jacinto Benavente, dijo: “El amor es como el fuego. Ven antes el humo los que están fuera... que las llamas los que están dentro”. Pero en tu caso, puedo ver que ese fuego te asfixia. Poco a poco vas decayendo en él, corres intentando localizar la salida pero estás tan ciega que no la ves. En tu último suspiro de vida, rezas desconsoladamente, ¿no es curioso cómo recurrimos a la fe cuando estamos al borde del precipicio? Tantos años marginándola, valiéndonos por nosotros mismos, y cuando el vacío y la desesperación son las únicas que están, retomamos con lágrimas su valor. Céntrate en tus pensamientos buscando una solución antes de que llegue ese día, pues te arrepentirás habiendo condenando tu vida. Pago yo la cuenta… será la última.       


Segunda parte: La Closerie des Lilas.

   -El Arco del Triunfo ha sido testigo de innumerables momentos históricos. Cierro los ojos y puedo imaginar las batallas y victorias del ejército francés bajo las órdenes de Napoleón. Treinta años de afán por construirse, qué gran arquitecto fue Jean-François Chalgrin. 
   La mujer se dio cuenta que su marido seguía con la mirada en el periódico. Depositó la suya en la copa de vino, volviéndola a levantar a él. 
   -Para ti era fácil que los dos viviésemos en el silencio. Que nuestros sueños perecieran en la tumba del conformismo. Antes al menos decías que todo saldría bien, ahora ni una sola palabra salir de tu boca que intente calmar el dolor que siento. ¿Se supone que nuestras vidas deben de ser así? ¿Quién nos lo dicen? ¡Que hable de una vez! La llave de liberación está oculta; ya la sostuve en mi mano, pero temblé teniendo su dominio y decidí olvidarla. El tiempo pasa cada vez con más agonía y voy dándome cuenta de la cárcel de nuestro amor. Si me librase de este suplicio, todo lo que tenemos empezaría de cero, hasta aterraría volver a luchar por lo que creíamos haber encontrado... El principio nunca es fácil. Observaremos nuestro rostro en el espejo para saber qué hicimos mal. Borraremos la imagen que tanto tiempo se mantuvo en nuestras vidas. Quitando cada espina pegada al corazón, entraremos en razón. Danzaremos a los primeros rayos del sol guiados por la armonía del viento. Soñaremos de nuevo con más castillos que construir. Y por último, reflexionaremos sobre la piedra fría las eternas luchas de nuestro ser.